Cuando el nombre de la provincia Peravia resalta en casos negativos todos nos lamentamos y salimos en defensa de nuestra gente, reconociendo que perdemos parte de nuestra identidad cuando sonamos por los medios de comunicación en hechos considerados repudiables. Y es que los buenos munícipes, los que aman esta tierra, celebran las acciones positivas que elevan el orgullo de nuestra gente.
Ahora que estamos en la antesala del turismo, donde nos corresponde promover la riqueza natural de la provincia, así como las prendas morales heredadas, precisamos aunar voluntades para reorientar la imagen social a partir de la promoción de los valores que atesoramos en nuestras comunidades. Más que sumarnos al coro de pesimismo que nos impide avistar el porvenir, es tiempo de construir, edificar y levantar las bases del desarrollo, comenzando por llamar la atención de aquellos que desconocen el potencial turístico de una provincia que lo tiene todo para despegar con éxito cualquier proyecto generador de divisas.
Así lo está haciendo el clúster turístico, una institución que busca atraer a futuros inversionistas, vendiendo el potencial con que contamos. En esos afanes apreciamos la entrega del arquitecto Juan Tejeda, quien junto a la directiva que preside, está realizando actividades de impacto Nacional e internacional, como la pasada muestra fotográfica Soy Baní, que se presentó en el centro cultural Perelló, y ahora en el fin de semana, con la competencia Nacional de Deportes Extremos realizada en el municipio de Matanzas, donde se dieron cita cientos de competidores provenientes de toda la geografía nacional.
Sin dudas, el clúster turístico está promoviendo a Baní, proyectando nuestra provincia y trazando la ruta turística que nos permitirá mostrar al mundo lo que tenemos aquí, a sólo 45 minutos de la zona colonial.
Si todos aportamos un poco para promover lo mucho que tenemos, pronto vendrán las inversiones, vendrán los empleos y tendremos el desarrollo que merecemos.