El mal estado de muchas vía terrestres mantiene en estado de alarma a moradores de sectores de la zona urbana y a moradores de áreas rurales.
En la Montería, tanto en Caoba como en Yaguarizo, el deterioro de su principal carretera mantiene a sus moradores desesperados.
Los caminos que enlazan los parajes de la Montería, al igual que del Matadero y el Recodo se hallan intransitable.
Un caso más cercano, es el que se presenta en el barrio Pericles de Peravia, donde se observan cañadas y furnias que mantienen impacientes a los residentes.
Cuando llueve, mientras el lodo de apodera de parte de las vías, por otro lado los vacíos y hoyos rebozan la paciencia de los moradores, los que llaman a los políticos que detentan el poder de ingratos.
Dicen que para tiempo de campaña han recibido la promesa dé repararle sus calles, pero que tras el pasar la campaña de olvidan de que ellos existen.
Los residentes del sector Pericles en Peravia demanda que se conduela de ellos, aunque sea, arreglándoles sus calles.