La población banileja aún no sale del asombro por la afirmación del senador Wilton Guerrero, en el sentido de que el anterior administrador del INAPA, retiró unos 500 millones de pesos que habían sido asignados para los trabajos del acueducto múltiple, los que servirían para construir las redes de interconexión en la parte norte. Una denuncia que merece la atención, en tanto apunta con el dedo acusador a un ex funcionario de la institución que tiene la encomienda de garantizar agua potable a la población.
Según Wilton Guerrero, Baní cuenta con un tanque de almacenamiento de agua en Villa Güera, que actualmente recibe agua suficiente, pero no cuenta con las redes de distribución para llevar el preciado líquido a los sectores que hoy lo demandan. Entre estos, El Fundo, La Saona, El Maní, Las Colinas, y otros barrios de la parte alta de la ciudad. Ante estas deficiencias no se concibe que se castigue a una población negándole la oportunidad de recibir agua potable en sus viviendas.
El senador llegó más lejos, tras afirmar que el ingeniero Alberto Holguín, retiró del banco los 500 millones de pesos con los que se trabajaría en la instalación de las redes que llevarían el líquido a los sectores antes mencionados. Es decir, el pasado director, según el senador, le hizo capú a los fondos que se habían asignado para terminar el acueducto, conforme a lo establecido. Algo increíble, que sólo ocurre en países donde los funcionarios hacen y deshacen sin rendir cuentas de sus actos. Ya en otras ocasione a la provincia Peravia le habían asignado millones de pesos que, a juzgar por los resultados, fueron malgastados sin que se rindiera un informe de los egresos.
A la redacción de este medio informativo han llegado comentarios de ciudadanos preocupados por saber más sobre la denuncia del senador Guerrero, denuncia que fue echa pública en el transcurso de un acto celebrado en la Gobernación Provincial, donde se anunciaba que se asumiría la conexión de la parte norte con las redes del nuevo acueducto. Este medio informativo se une a las voces de personalidades banilejas que abogan porque el robo de los 500 millones de pesos que fueron destinados para el nuevo acueducto tenga consecuencia jurídica.
Entendemos importante que las autoridades de la provincia no se queden en la simple denuncia, sino que deben accionar todo un proceso judicial que conlleve castigo ejemplar. El pueblo no puede tolerar que se le margine desde el Estado, y mucho menos dejar de lado reclamar respeto de quienes van a los cargos públicos con el malsano propósito de quedarse con lo que es nuestro. El senador Wilton Guerrero debe llegar más lejos, propiciando que Alberto Holguín comparezca ante las instancias judiciales para que explique el destino de esos 500 millones de pesos.