Moradores de las comunidades del Recodo y las Yayitas reclamaron hoy, una vez más, la construcción de los puentes sobre el río Baní, los cuales evitarían que se queden incomunicados en tiempo de lluvia.
Niños, jóvenes y adultos que a diario utilizan los puentes improvisados hablaron de las dificultades que enfrentan para cruzar el río en temporada lluviosa, como es la falta de acceso a Bani u otro pueblo cercano a realizar sus diligencias, como abastecerse de alimentos o conseguir asistencia médica.
Pero gracias a Domingo Encarnación que le construyó este puente de palo, el comercio, la educación y otras actividades no se paralizan en la zona después que pasan los torrenciales.
Finalmente los agricultores y los estudiantes son los más afectados por las pérdidas de sus productos y el cierre de las clases.