El presidente de la asociación Santa Terecita, de la comunidad Quija Quieta, se quejó porque aún las autoridades no le han dado respuesta a una familia que resultó asaltada en su propio hogar.
Francisco Castillo sostiene que hace varios días que la familia fue atracada por elementos armados que los despojaron de pertenencias.
Afirma el dirigente campesino que los delincuentes han sido identificados y la policía, aunque cuenta con todas las evidencias, se muestra con poco interés en apresar a los culpables.