El antiguo cementerio de esta ciudad se ha convertido en la residencia de personas con problemas mentales, según la denuncia realizada a este medio.
Además del evidente abandono por parte de las autoridades municipales, ya que se puede observar en el lugar maleza, desechos sólidos y hasta arboles derrumbados a causa de un fuego premeditado, en el antiguo cementerio de esta ciudad, ubicado en la calle Francisco Gómez (Paco), esquina Beller, se han instalado varias personas con problemas mentales, según explicó un munícipe fuera de cámaras.
Según la información ofrecida, los nuevos moradores del antiguo cementerio se han establecido desde hace un tiempo y duermen en las criptas abandonadas, dando se en caso de que en ocasiones cocinan los gatos callejeros que atrapan.
Aunque la puerta principal tiene una candado para evitar la entrada de intrusos, los nuevos inquilinos del cementerio han creado su propia entrada, tal y como se puede observar en las imágenes captadas por el camarógrafo de este medio.
Se recuerda que esta no es la primera ocasión en la cual este medio se ha hecho eco de las denuncias sobre el estado de abandono que presenta la referida estructura y que en una ocasión se llegó a presentar el caso de que alguien había sembrado guandules en su interior. Además de que en el exterior el cumulo de basura es constante.
Actualmente el deterioro del antiguo cementerio de Baní, así como del parque construido en la parte frontal, continúa sin que las autoridades correspondientes tomen las medidas necesarias para solucionar esta problemática