El médico legista Walter López, desmintió, que un recluso de la cárcel local, acusado de la comisión de delitos informáticos, falleciera a consecuencia de golpes recibido en la cárcel local.
Afirma el legista, que Efraín Liranzo quien había sido apresado en San José de Ocoa pero que era oriundo de Bonao, era un paciente epiléptico, que había sufrido una crisis en la cárcel de donde fue llevado al hospital.
Asegura que aunque al interno se le mandó a realizar una autopsia para darle cumplimiento a lo que estable la ley en los casos de todas personas que mueren en recintos carcelarios, su cuerpo no presentaba ninguna señal de violencia.
Sobre la muerte de este interno se han tejido muchas especulaciones en las redes sociales, que dan cuenta, de que fue sacado de la prisión para ser torturado y causarle la muerte.
Pero según atestigua, el médico legista Walter López, los rumores y comentarios que se han hecho carecen de veracidad.