La Policía Nacional, tras aclarar que no mataron los gallos que ocuparon en una gallera clandestina montada en el barrio Washington de Matanzas, afirma que los mismos fueron entregados a través del ministerio público.
El relacionista público de la institución del orden en la zona, coronel, Carlos Villar Luna, no obstante sostener que no le quitaron la vida a ningún gallo, como se ha dicho, reconoció que muchos de ellos murieron asfixiados, cuando eran transportados a la institución.
Refiere el coronel Villar Luna, que los gallos de pelea fueron entregados a una institución que intervino a favor de las aves.
En otro orden y con respecto al toque de queda dijo que ayer detuvieron por violar el mismo a unas 24 personas.