Hoy 21 de septiembre se celebra el Día Mundial del Alzheimer, proclamado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y auspiciado por Alzheimer’s Disease International (ADI).
El primer Día Mundial del Alzheimer se celebró en 1994. Y desde el 2012 la organización Alzheimer’s Disease International (ADI) decidió extender la conmemoración por todo el mes de septiembre, y así se consignó el Mes Mundial del Alzheimer.
La enfermedad de Alzheimer se considera la nueva epidemia del siglo XXI. Se estima que para el año 2050 el número de personas con alzheimer ascienda a 131.5 millones.
Sobre todo se trata de concienciar sobre esta enfermedad, que afecta no solo a los pacientes sino también a los cuidadores directos y familiares.
Por el momento no hay una cura para el Alzheimer, pero si se pueden realizar rutinas y actividades para retrasar el deterioro que causa la enfermedad. Principalmente los objetivos del Día Mundial del Alzheimer pueden resumirse en los siguientes:
Conocer las necesidades reales de los enfermos. Brindarles terapias de estimulación para la memoria, ejercicios mentales.
Ofrecer apoyos públicos a las personas con Alzheimer y sus cuidadores.
Investigación sobre el Alzheimer y sus tratamientos.
Ofrecer formación sobre la enfermedad y apoyo psicológico a los cuidadores.
Campañas de prevención de la enfermedad, trabajando en los factores de riesgo modificables.
Aunque no hay evidencias científicas, se piensa que el origen de la enfermedad del alzheimer se debe a una combinación de factores de riesgo, algunos de ellos no modificables, como la edad o la genética). Pero sí que existen algunos factores modificables, de estilo de vida.
En este sentido, el Comité de Médicos por una Medicina Responsable publicó un estudio en donde se presentan siete hábitos que podrían reducir entre un 70% y un 80% la presencia del Alzheimer, y son los siguientes:
Reducir el consumo de grasas saturadas.
Hacer de las verduras, frutas, legumbres la base de la pirámide alimenticia.
Consumir alimentos con vitamina E.
Consumir alimentos con vitamina B12.
Evitar los multivitamínicos con hierro y cobre (a menos que lo indique un médico).
Evitar cocinar en ollas y sartenes de aluminio.
Mantenerse activo físicamente.