En sectores marginales de la ciudad residen muchas personas en estado extrema pobreza, cobijadas por frágiles viviendas, carentes de los servicios fundamentales y urgentes que requiere un ser humano.
Es el caso del señor Manuel Reynoso, alias Cabo, quien asegura tener unos ochenta años y residen en una humilde vivienda en las peores de las condiciones, con piso de tierra y sin agua potable ni energía eléctrica.
El Cabo cuenta a Peravia noticias que trabajo por muchos años como chofer público en la capital, pero que tras enfermar y tener que dejar el trabajo, se ha visto envuelto en una situación de depresión económica delicada.
Refiere que tuvo que irse para este lugar, ubicado a la parte oeste del barrio villa Boston y levantar esta casita, donde se refugió, con todo tipo de limitación, incluidos problemas de catarata en sus ojos.
Este pobre hombre, aunque asegura que le llevan comida, vive en condiciones infrahumanas, dentro de una casita destartalada, sin condiciones sanitarias, que cuando llueve el agua cae en su interior para ligarse con su piso de tierra y hacer uno lodazal.
El señor Manuel Reynoso, alias cabo, clama porque las autoridades lo tomen en cuenta en la ejecución de cualquier programa de reparación de viviendas…