Así como lo oyen..! En lo que ha sido considerado como una burla a la justicia, la procuradora adjunta Yeni Berenice Reynoso dijo que al momento de intervenir la caja fuerte del ex procurador Jean Alain Rodríguez, se encontraron la sorpresa de que la misma estaba llena de plátanos. Es decir, en vez de documentos había rubros. Sin dudas, algo que desnuda la naturaleza del acusado de una presunta estafa al Estado.
La singular acción aconteció luego del apresamiento del ex procurador, quien fue trasladado hacia su oficina para abrir la caja. Y allí, con cara de risa, de manera burlesca, el señor Jean Alain Rodríguez hizo su peor actuación como parte de un show que mereció la descalificación.
El ex funcionario judicial, a sabiendas que estaba siendo investigado, guardó los plántanos en la caja fuerte.
Y aunque también suena fuerte, con el tema de la burla también bajó fuerte la magistrada Reynoso, quien sin mucho alboroto, sólo atinó a decir: “Estaba vacía”
Obviamente, con lo de la burla reaccionó diferente, tras señalar que él mismo dijo públicamente que tenía conocimiento de la investigación, lo que se constituye en un riesgo procesal y por eso debe estar en prisión preventiva.
En ese sentido, el Ministerio Público pidió 18 meses de prisión y la declaratoria de caso complejo contra Jean Alain Rodríguez y su asesor José Moya, quien admitió que en la procuraduría le pagaron la suma de 19.5 millones de pesos para impartir unos cursos que nunca se dieron. Según se supo, el presunto entramado corrupto hasta hacía el registro de participantes.
Y como es bien conocido, el voluminoso expediente contenido en el caso “Medusa” nos presenta una multiplicidad de acciones que revelan -hasta dónde- descendió la procuraduría en su condición de espacio de solemnidad y justicia. Escuchar que en ese sacro lugar se procedía al envasado de ron, es un indicador de cómo estaba dirigida la institución.
Y en cuanto a la burla, es oportuno reflexionar, porque la misma no ha sido a Yeni Berenice y Miriam Germán, sino que ha sido a toda la sociedad.
Ahora que recibimos la información de los rubros agrícolas contenidos en la caja fuerte de Jean Alain, sólo nos queda preguntar: ¿en manos de quién estaba la justicia? Quizás el hallazgo de los plátanos nos dé la respuesta. Mientras tanto, seguiremos de cerca el histórico caso.