Aunque ya nada sorprende al saqueado pueblo dominicano, las últimas evidencias de corrupción presentadas por la Cámara de Cuentas, tras haber auditado el llamado Fondo Patrimonial de las Empresas Reformadas (Fonper), causan espanto.
Y no sólo por el dato revelador del despilfarro sostenido durante siete años, donde pagaron más de RD$259 millones de pesos en “botellas”, sino que además, 37 militares cobraban sin trabajar.
Obviamente, donde las nóminas de las instituciones del Estado no se respetan, la información de que el Fonper pagó a quien no trabajó no causa sorpresa, como tampoco podemos sorprendernos del falseamiento de los datos presentados en el portal de la recién eliminada institución que dirigían Fernando Rosa y Carmen Medina, hermana del expresidente Danilo Medina, quien fungía como vicepresidenta y directora administrativa, ambos involucrados en la Operación Antipulpo.
Ahora bien, de todo esto lo que sí espanta es el dato presentado por la Cámara de Cuentas, donde se establece que Lucía Medina recibió RD$52 millones de pesos de RD$53 entregados por el Fonper en donaciones. Una barbaridad extrema, en un país con cientos de organizaciones sociales y comunitarias que rinden frutos considerables a la sociedad dominicana.
De ahí la reacción de la población al saber que doña Lucía Medina recibió casi la totalidad de las ayudas sociales de esa entidad durante ocho años. Y peor aún, se cuenta entre las menudas irregularidades, los pagos irregulares de miles de recetas sin soportes confiables a nombre de empleados, más los gastos por conceptos no aclarados de bonos de aniversario a favor de militares que no figuraban como empleados fijos. Sólo por ese motivo pagaron más de cuatro millones de pesos en regalía pascual o sueldo 13, en franca violación del Reglamento de Aplicación de la Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas. Solo para tener una idea de las anomalías encontradas, la auditoría consta de más de 300 páginas que están en manos de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa. Recordamos que el Fonper fue creado durante el gobierno de Hipólito Mejía como una iniciativa para favorecer a entidades sociales, especialmente las que trabajan a favor de los sectores vulnerables, y que fue eliminado por el actual gobierno.
La realidad indica que durante los ocho años del presidente Danilo Medina, los fondos generados fueron manejados como si se tratara de una finca. Solo eso explica que de 53 millones de pesos, la señora Lucía Medina agarrara la tajada de 52, dejando un millón para todos los demás. Y los demás son los demás, los que por igual se afanan por servir a la sociedad y merecen contar con la ayuda del Estado. Por lo pronto, lo que debemos esperar es el correcto accionar de la justicia, para que los malos ejemplos sean debidamente sancionados sin dobleces. Es ese el mejor aporte a la eficientización de la gestión pública.