Peravia, RD.-
La vida de la joven Yasmin Garcia tenía un rumbo incierto, madre soltera de cuatro hijos, vivienda alquilada y con deseo de estudiar pero lo poco que gana como conserje en el hospital Nuestra Señora de Regla no le permite continuar avanzando.
Pero un día tomo la decisión de narrarle su calvario a su amigo Alexandro Robles Garcia y como un enviado de Dios conto su historia y las ayudas no tardaron en llegar. Aunque Yasmin quiso aclarar su situación porque no todos son personas generosas y tolerantes.
Un poco asustada siguió contando que difícil es estudiar en la universidad, dejar a sus hijos donde su abuela y trabajar de noche.
En su humilde casita en los barracones alberga la esperanza de encontrar un mejor trabajo pero su atraso en la universidad no se lo permite.
Agradecida de Dios, Alexandro, el Jevito de Fin de semana y otras personas que ven ahora en ella una madre luchadora todavía no acepta que se ha vuelto viral y que esto les favorece en vez de perjudicarle.
La grandeza de Yasmin la demuestra cuando se aferra a sus estudio y a un mejor trabajo para sobreproteger a sus criaturas por eso se le observa delgada y con mucha ansiedad.
Al final contó un poco de su historia con el único interés de que la ayuden a mejorar su situación a través de un mejor horario en su empleo, una beca universitaria y que la población entienda que no es fácil la condición de madre soltera.