El fatídico asesinato del ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Orlando Jorge Mera, sorprendió en el día de ayer a toda la sociedad dominicana. El joven político cayó abatido por las balas disparadas por su amigo de infancia, Miguel Cruz, en un hecho que ha conmocionado al país. ¿Quién podría imaginar que uno de sus mejores amigos terminaría siendo su asesino? Pasado el medio día, el sonido de los proyectiles alertaban sobre el hecho de sangre, y minutos más tarde se abría la puerta del despacho para confirmar que el ministro había perdido la vida. Así vimos correr a decenas de servidores públicos y visitantes que salían desesperados, todos presas del pánico. Las imágenes que todos observamos quedarán grabadas para siempre en la mayoría de la población dominicana, como un episodio oscuro de la historia nacional, ya que no sólo perdimos a un ministro , sino que sentimos la pérdida de un ciudadano honesto, trabajador responsable y funcionario insobornable. Por eso la nación está de luto ante su partida física.
Así recordamos en Baní sus constantes visitas con el propósito de velar por la preservación de nuestros recursos naturales. Lo veíamos en la reserva de Las Dunas, en las montañas del Manaclar y en los afanes propios de su misión.
Por eso en la provincia Peravia vamos a extrañar la presencia de Orlando Jorge Mera, el defensor de los recursos naturales.
Ante su partida repentina, forzada por las manos asesinas, el presidente de la República, Luis Abinader, acaba de declarar tres días de duelo oficial, a partir de hoy y hasta el día 9 de junio donde la bandera nacional estará ondeando a media asta.
Peravia Noticias, el Grupo de Comunicaciones Ortíz Ruíz y todo nuestro personal se une al dolor que embarga a la familia Jorge Villegas, al superior gobierno y a todos los miembros del Partido Revolucionario Moderno, así como también a todo un pueblo que sueña y merece vivir bajo un clima de paz, amor y fraternidad.
Ahora que Orlando Jorge Mera emprendió el viaje hacia la eternidad es necesario emular sus aportes en defensa de la democracia, por la preservación del medio ambiente y por la construcción de una sociedad más justa y solidaria.
¡Paz a su alma!