El oscurantismo que caracteriza a muchachas familias haitianas, inmersas en creencias y rituales propios de su cultura, fue causante del asesinato de un niño de un año de edad.
El repudiable hecho ocurrió en la comunidad Higuana, donde reside una haitiana de 19 años de edad que había procreado una criatura a la que le dio por nombre Diego Ricardo.
Miranda Ricardo, madre del niño vilmente asesinado a puñalada por su padrastro, narró, que su marido, mato a la criatura, alegando que el padre biológico le había echado una brujería al pequeño, la que se revertería en su contra, por lo que dispuso en contra del infante el que mató con distintas heridas punzantes.
Con relación a las heridas que presenta el infante la legista Mercedes Félix ofrece detalles. Corte.
El responsable del infanticidio, tras cometer el vulgar asesinato, golpeo a la madre del niño para de inmediato emprender la huida.
Se dijo que agentes del DICRIM buscan activamente al victimario para ponerlo a disposición de la justicia.