En realidad son muchas las obras que necesitamos para colocar esta provincia en la ruta del desarrollo. Desde hace años venimos propugnando porque se construyan las más prioritarias, las que por décadas son demandadas.
En esa espera que se posterga en la medida que crece la desesperanza, han surgido otras necesidades, y han llegado a la provincia Peravia nuevos proyectos de grandes dimensiones que ameritan otras alternativas de soluciones para asentarse con el respaldo del estado dominicano sobre bases sólidas. Así ocurre con la construcción de la avenida de circunvalación, una obra concebida para descongestionar el tránsito en la ciudad, y que -sin oposición- todos reconocemos que debe ser construida por la zona Norte, entendiendo los beneficios que habrá de generar.
Sin embargo, la obra que comenzamos a ponderar desde hace más de tres décadas, ahora se encuentra ante otra realidad que no podemos ignorar: Baní comienza a despegar en el área del turismo, por lo que también debemos contar con una avenida que facilite el flujo de turistas hacia el nuevo destino que se comienza a gestar. Ahora, junto a la avenida de circunvalación Norte se requiere la construcción del bulevar Sur, dos obras distintas, dos grandes proyectos que puede materializar el presente gobierno. Baní es una gran ciudad.
Necesitamos estimular las inversiones en el sector turismo, pero nunca debemos obviar la necesidad fundamental de sacar los vehículos pesados por el centro de una ciudad que no resiste más… Todo luce indicar que pronto iniciará la construcción del bulevar, pero la lucha por la circunvalación Norte no debe desmayar por el bien de una población que busca transitar con pasos firmes por la ruta del desarrollo. Entendemos que el estado debe impulsar las inversiones, que estamos en la antesala del turismo, pero también tenemos una franja olvidada en la parte norte de nuestro municipio. Y hacia ellos también deben llegar los beneficios.