El próximo domingo la ciudad de Baní estará celebrando los 255 años de su fundación, ocasión propicia para recordar a quienes aquel memorable 3 de marzo, de 1764, vieron consumado el sueño de convertir en villa la antigua comarca comprendida entre las márgenes de los ríos Ocoa y Nizao.
De nuevo la plaza de Los Fundadores será visitada por las autoridades y personalidades que acuden a los actos alusivos a una fecha tan significativa para el pueblo banilejo. Sin embargo, a dos siglos y medio de su fundación, no contamos con una sola calle de la ciudad con el nombre de uno de los fundadores de Baní. Un lastre histórico que nos conduce por el empedrado camino de la ingratitud.
Cada año acudimos a la plaza a escuchar discursos, depositar ofrendas y rendir tributo a quienes poco a poco van quedando en el olvido. Pero lo que más irrita es observar el comportamiento de políticos que nada aportan al desarrollo de la ciudad. Los mismos que parecen ciegos ante los problemas que nos afectan. Los que llevan décadas subido en el tren del Estado y están sordos y ciegos frente a los reclamos de la población. Como es de suponer, los banilejos soñamos con el renacer de la cultura, con obras de envergadura y con un pueblo decidido a mantenerse en pie de lucha.
Ojalá que en la antesala de la fiesta, se tomen en cuenta nuestras sugerencias a favor de la ciudad, para que se priorice en sus necesidades. Somos parte de esta tierra, queremos rescatar el orgullo de vivir en una ciudad que hasta hace poco se consideraba como una de las más limpias del país. Pero el más grande esfuerzo le corresponde a quienes vestidos de autoridad marginan la ciudad de las políticas de desarrollo urbano, los que la han dejado llenar de hoyos, los que han descuidado sus funciones y buscan justificar su falta de voluntad para corregir los problemas que afectan a una ciudad que merece más.
Nuestro mayor deseo es participar de una celebración por los frutos alcanzados en una gestión municipal que hasta ahora tiene muy pocos logros que mostrar.
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𝐏𝐞𝐫𝐚𝐯𝐢𝐚, 𝐑.𝐃. 𝐔𝐧 𝐠𝐫𝐚𝐧 𝐩𝐨𝐫𝐜𝐞𝐧𝐭𝐚𝐣𝐞 𝐝𝐞 𝐥𝐚 𝐩𝐨𝐛𝐥𝐚𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐩𝐞𝐫𝐚𝐯𝐢𝐚𝐧𝐚 𝐜𝐨𝐧𝐬𝐢𝐝𝐞𝐫𝐚 𝐪𝐮𝐞 𝐜𝐨𝐧 𝐮𝐧 𝐜𝐚𝐦𝐛𝐢𝐨 𝐞𝐧 𝐥𝐚 𝐝𝐢𝐫𝐞𝐜𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐩𝐫𝐨𝐯𝐢𝐧𝐜𝐢𝐚𝐥 𝐝𝐞 𝐌𝐞𝐝𝐢𝐨 𝐀𝐦𝐛𝐢𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐜𝐞𝐬𝐚𝐫𝐢́𝐚𝐧 𝐥𝐚𝐬 𝐯𝐢𝐨𝐥𝐚𝐜𝐢𝐨𝐧𝐞𝐬 𝐪𝐮𝐞