Un joven que había recibido varios disparos de bala por parte de agentes policiales, que alegaron se trataba de un delincuente, versión que negaron sus familiares, ya se encuentra en su hogar en periodo de recuperación.
Edgardo Herrera Miniño, tito, de 24 años, según su padre, Ismael Tejeda Mejía, recibió 14 disparos de bala, para salvar la vida milagrosamente.
Después de permanecer por cierto tiempo recluido en un centro hospitalario, fue sometido a la justicia para el conocimiento de medidas de coerción, la que consistió en prisión domiciliaria.
El padre de la víctima asegura que con su vástago se cometió una injusticia, ya que se dirigía con una hermana suya por la estancia que se encuentra entre Guazuma y Los Barracones, al momento de ser atacado a tiros.
Tras defender a su hijo y negar que se tratara de un delincuente, demandó que se haga justicia contra los policías culpables de su agresión.