Cuando pasamos balance a los altos niveles de contagios que hemos alcanzado luego del pasado proceso electoral, es preocupante que estemos asistiendo a un desfile de muertes que pudimos haber evitado sólo si hubiéramos observado las medidas de protección que tanto se han anunciado. Obviamente, cuando la población asumió el encierro y distanciamiento al inicio de la pandemia, el cúmulo de contagios parecía controlado. Sin embargo, en un país altamente politizado, en medio de una campaña electoral, con autoridades permisivas y por demás comprometidas con empujar al candidato oficial, se dio riendas sueltas al vendaval de actividades donde se concentraban miles de personas que poco a poco les fueron perdiendo el miedo al coronavirus.
De hecho, a modo de ejemplo no sólo contamos el viacrucis del famoso peregrino, sino que también vimos a los candidatos de los diversos partidos protagonizando actos masivos sin ningún tipo de distanciamiento. Hoy despertamos con más de diez diputados contagiados, al igual que el senador electo por San Cristóbal, y los alcaldes de los municipios de Santiago y Mao. Justo en la ciudad de Mao, provincia Valverde, falleció a causa del virus, la diputada electa por el Partido Revolucionario Moderno, Zaida Polanco, mientras que el país aún no se repone de la muerte del cantautor Víctor Víctor.
La situación de crisis por el Covid-19 comenzó a dejar sus efectos negativos desde antes de las elecciones cuando el candidato presidencial Luis Abinader informó al país que él, su esposa e hijas habían dado positivo. Luego siguió el Supervisor Nacional de Campaña, Tony Peña Guaba y ya el pasado sábado se conocían las muertes de un general, un coronel y un capitán de la Policía Nacional.
Cómo podemos observar, los efectos nocivos del coronavirus también han tocado este municipio, donde la pasada semana perdimos dos reconocidos ciudadanos, el joven Junior Santana, de 34 años, y Augusto Mariñez, de 64. Es decir, el coronavirus, el enemigo que se desplaza sin mostrar el rostro, está entre nosotros.
Ya no se trata de especulación, no son cifras y estadísticas que mueven a rumores. Son casos conocidos donde vemos perder amigos y vecinos sin importar el nivel o estatus social.
De ahí el llamado a reforzar las medidas preventivas, actuando de manera responsable, cumpliendo con los protocolos establecidos, incluyendo el uso obligatorio de mascarillas.
Ojalá que todos los ciudadanos, asumamos una actitud responsable para lograr detener las muertes por Covid-19. Ahora que volvemos a la cuarentena, es urgente que actuemos de forma diferente.