Manuel G. Mejía
Muy a pesar de que el Ayuntamiento municipal el jueves pasado le dio un plazo de 24 horas al propietario de la ferretería responsable de una pared que limita con el sector Villa Carmen, para demoler la misma, que al derrumbarse una parte de esta recientemente mató a tres personas, resulta que la pared en cuestión sigue lo más campante y atentando contra la vida de 14 familias.
Se cumplió el plazo de las 24 y desde el jueves hasta el día de hoy la pared sigue en el mismo lugar, mientras que las autoridades municipales no han hecho nada para hacer valer su disposición.
Se recuerda que tras derrumbarse una parte de la pared mató a una niña, su madre y abuela y que podrían correr la misma suerte otras familias que habitan en el área.
Al fondo de la otra parte de la pared que queda hay más de 13 casitas que de desplomarse la misma, las aplastaría y a sus habitantes también.
Los residentes del sector “La paja”, como se le conoce a la pequeña localidad, esperan que la Alcaldía haga valer su autoridad procediendo contra el propietario de la ferretería que se resiste a eliminar el peligro.