Al finalizar la época navideña con los tradicionales obsequios, patentizados con el sello de políticos “que movidos por el encanto de las canastas” y otros presentes, dan vida y color a una celebración asentada en las raíces cristianas.
Ahora que terminaron las fiestas, que pasamos balance de lo individual hasta lo colectivo, más allá de lo que recibimos, de lo que esperábamos y no conseguimos, hay una reflexión que no podemos ignorar: llegó la hora de trabajar. Es tiempo de retomar la agenda, de abrir las puertas a un nuevo año con optimismo, reconociendo nuestras limitaciones y debilidades para convertirlas en fortalezas que impulsen a grandes realizaciones.
La provincia Peravia espera más de nosotros. Sentimos que poco a poco vamos superando los obstáculos, que cumplimos con crear los espacios necesarios para relanzar la provincia por las sendas del progreso, y que estamos decididos a luchar para que nos tomen en cuenta en el presupuesto nacional. Pero lo más significativo ha sido reconocer cómo en otras provincias del país el gobierno está construyendo obras millonarias, incluyendo grandes avenidas, edificios gubernamentales, escuelas, viviendas, y acueductos, mientras nosotros como provincia, éramos excluidos del presupuesto, y relegados a vivir de promesas y más promesas.
Ahora que el año apenas comienza, es el momento oportuno para retomar la agenda, priorizando en lo que queremos lograr, asumiendo trabajar en unidad para que la provincia Peravia jamás vuelva a ser excluida de la agenda de ningún gobierno. Por lo pronto, cabe preguntar: Cuándo será convocado el Consejo de Desarrollo Provincial?