La comunidad deportiva de la provincia Peravia esperó por años el anuncio de la sede de los Juegos Deportivos Nacionales, no sólo por el impacto de la celebración, sino que además, por los frutos que se derivan de la acción del Estado a partir del compromiso asumido.
Es entendible que la sede nos coloca en primer plano, como pueblo anfitrión que abrirá sus puertas a la hospitalidad, acogiendo a miles de personas, entre ellos atletas, entrenadores y dirigentes de federaciones y entidades deportivas, incluyendo a decenas de periodistas. En Igual dimensión podemos citar las obras que deben ser construidas para facilitar las competencias en las distintas disciplinas deportivas que participan en el marco de esta celebración. De ahí nuestra preocupación, porque pasan los meses y aún esperamos por la integración de un comité organizador que impulse con energía los pasos que debemos seguir para alcanzar el éxito de la fiesta deportiva más importante de los dominicanos. Reconocemos la disposición del gobierno, expresada por el ministro de deportes, pero tampoco dejamos de reconocer los trámites burocráticos que se deben seguir para propiciar la construcción de obras en el país. Es en ese aspecto que entendemos la necesidad de comenzar a construir.
Justo es reconocer el papel jugado por las autoridades, por los representantes de las entidades deportivas y por quienes respaldaron la iniciativa para que nuestra provincia fuera favorecida. Sin embargo, no nos podemos sentar a aplaudir hasta que no comiencen a construir las instalaciones deportivas que permitan competir con las condiciones requeridas. Durante décadas esperamos esta oportunidad, ya contamos con la sede de los Juegos Deportivos Nacionales, y es el único espacio que se presenta para que los atletas de la Región Valdesia puedan continuar sus prácticas y actividades deportivas de forma permanente. Esa es la única esperanza de una juventud que se destaca con sacrificios, y que merece un trato digno.
Se registra Litis entre empresario y periodista peraviana por supuesta difamación
𝐏𝐞𝐫𝐚𝐯𝐢𝐚, 𝐑.𝐃. 𝐔𝐧 𝐜𝐨𝐧𝐟𝐥𝐢𝐜𝐭𝐨 𝐫𝐞𝐥𝐚𝐜𝐢𝐨𝐧𝐚𝐝𝐨 𝐜𝐨𝐧 𝐞𝐥 𝐜𝐚𝐫𝐫𝐨 𝐟𝐮́𝐧𝐞𝐛𝐫𝐞 𝐝𝐞𝐥 𝐦𝐮𝐧𝐢𝐜𝐢𝐩𝐢𝐨 𝐝𝐞 𝐍𝐢𝐳𝐚𝐨 𝐡𝐚 𝐝𝐞𝐬𝐞𝐧𝐜𝐚𝐝𝐞𝐧𝐚𝐝𝐨 𝐮𝐧𝐚 𝐥𝐢𝐭𝐢𝐬 𝐩𝐨𝐫 𝐬𝐮𝐩𝐮𝐞𝐬𝐭𝐚 𝐝𝐢𝐟𝐚𝐦𝐚𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐞𝐧 𝐩𝐞𝐫𝐣𝐮𝐢𝐜𝐢𝐨 𝐝𝐞 𝐥𝐚 𝐩𝐞𝐫𝐢𝐨𝐝𝐢𝐬𝐭𝐚