Son las malas actuaciones de las autoridades las que despretegian las instituciones que representan. Hemos llegado al colmo de contar episodios que llenan de vergüenza, porque son cometidos por miembros de las entidades llamadas a imponer el orden y el respeto en nuestra sociedad.
Son muchas las denuncias donde ciudadanos apuntan hacia la Policía Nacional, dejando al desnudo las prácticas indecorosas de agentes que en pleno ejercicio de sus funciones estafan, agreden y humillan a personas que por desgracia se cruzan a su paso. Sin embargo, resulta aterrador escuchar que estos hechos se realizan frente a la Dirección Regional Sur Central de la Policía Nacional, donde despacha el general Pacheco Garabito, según lo denunciara la señora Marina Sánchez, a Peravia Noticias.
Cuando la población se aprestaba a recibir el nuevo año, la noche del 30 de diciembre, policías, guardias y miembros de la Armada Dominicana, montaron un retén, no para ocupar sustancias o armas ilegales, sino que buscaban su año nuevo, despojando a las personas que transitaban por la zona en vehículos de lujo, de altas sumas de dinero. Obviamente, las víctimas fueron muchas, tal como salió a relucir en el programa Visión Matinal, transmitido por el hermano canal 3 de Visión 3000.
La señora Marina Sánchez relató lo ocurrido a ella y a su pareja, al igual que a otros transeúntes, cuando pasaban por la fortaleza Máximo Gómez, donde al detenerlos le preguntaron a su esposo que si portaba armas de fuego, y al éste contestar que sí, y mostrar la documentación legal al día, aun así fue detenido durante casi una hora, y para dejarlos ir tuvieron que entregar la suma de diez mil pesos, lo que consideró como un atraco.
Acciones como estás, que son denunciadas con valentía, deben ser investigadas para que los agentes culpables de tales abusos reciban las sanciones penales establecidas. ¿Cómo es posible que la ciudadanía sienta espanto y temor de la Policía? Reiteramos la necesidad de poner fin a las acciones que manchan la imagen de nuestras instituciones, sobre todo, de las que tienen como deber imponer el orden. Con justa razón, en términos de valoración de los ciudadanos, la menos confiable es la Policía Nacional, porque en casos como el denunciado, se evidencia la falta de vergüenza con que actúan la mayoría de sus miembros. Ojalá que el general Pacheco Garabito responda con mano dura para que no se repita este tipo de delitos, y mucho menos por miembros de su propio equipo.